viernes, 11 de febrero de 2011

De cajas, collares y alfajores

El 25 de diciembre, Gonzalo me entregó una caja envuelta en papel navideño. Al entregarme la caja me dijo: "no te los comas todos". Desenvolví el regalo y vi que era una caja de alfajores. Decidí guardarlos en su caja sin abrir para comerlos en otro momento. Ya sabemos que las fiestas de fin de año vienen acompañadas de mucha comida.

Al cabo de unos cuantos días, recordé los alfajores. Busqué la caja y al abrirla me di con la sorpresa de que no había alfajores adentro sino un collar. Esto debe ser una broma de Gonzalo, me dije.

Llegué a usar el collar en una reunión del Grupete.

Casi a fines de enero, recibí un e-mail de Ana Cé, cuya parte pertinente copio a continuación:
Una curiosidad. ¿Te comiste los alfajores que te regaló Gonzalo? Te lo pregunto porque ayer me llamó la amiga que los estaba vendiendo y me preguntó una cosa rarísima: si no había encontrado un collar dentro de la caja de alfajores. Yo me quedé con cara de plop pero me explicó que su hijito estaba jugando con una caja de alfajores y guardó un collar de ella ahí, sin que nadie se diera cuenta.
Yo le compré dos cajas de alfajores, una para la casa y otra para que Gonzalo te la regalara. Como la nuestra sí nos la comimos, debo suponer que en la tuya es que estaba el collar.
Entre el asombro y la risa iniciales, le contesté que si, que yo tenía el collar, que pensé que ponerlo en la caja de alfajores había sido una broma de Gonzalo y que hasta lo había usado una vez. Ana Cé me mandó otro mensaje diciéndome que el asunto sería una buena historia para este blog.

Después me puse a pensar en la serie de azares que rodeaban la historia. Un niño jugando elige al azar una caja vacía de alfajores de los que su mamá preparó para Navidad y pone ahí un collar. No solamente lo pone ahí sino que se acuerda de haberlos puesto ahí. Otra persona, Ana Cé, compra dos cajas de alfajores, que son elegidas al azar por la persona que las vende. Al azar también, Ana Cé elige sin abrir una de las dos cajas de alfajores (que en verdad contiene el collar de marras) para hacerme un regalo. Abre la otra que si tiene alfajores y la comparte con Gonzalo. Yo abro mi regalo, me llama la atención no encontrar lo que esperaba encontrar, pero lo tomo como una broma.

Nadie tiene por qué sospechar que está en marcha una confusión que comenzó con un niño jugando. Un niño cuya buena memoria hizo que esta historia de confusiones y de azares terminara bien y con todas las piezas en su sitio.

Un momento, ¿dónde quedaron mis alfajores? Exijo una explicación.
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Cómo me disgusta que se use la palabra zurdo para designar a personas con ideologías de izquierda. ¿Acaso les dicen diestros a aquellos que tienen simpatía por las ideologías de derecha? No, qué va. Nada que ver. Diestros son los hábiles y expertos en un oficio. ¿Qué tiene que ver mi tendencia natural por la mano izquierda con la política? Ojo, no tengo nada en contra de los que optan por la ideas de izquierda. Eso es de cada quien.
Por segunda vez en un mismo día, exijo una explicación.

19 comentarios:

  1. Buena Historia y ademas algo magica,A PROPOSITO A QUE SABEN LOS COLLARES?

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  2. Sabes qué? Me recuerda el vestido de la Cenicienta. Se lo puso solo una vez pero lo disfrutó, no es cierto? Igual pasó con el collar, que te diste el gusto de lucirlo en tu reunión. Y la verdad que estaba muy bonito.

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  3. Me he reído de buena gana con la historia de desencuentros-encuentros....dime, ¿qué tal si hubiera sido un ANILLO?

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  4. A mi me pasó algo parecido. Un tío me regaló una copia de La Serpiente de Oro, como ya lo había leido, lo puse en el librero y no pensé mas en el libro. Años mas tarde haciendo limpieza, abrí el libro y encontré US$ 20 que mi tío me había dejado de propina. Me cayó a pelo.

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  5. Jajajaja que bueeeena!!
    Yo opino q deberian dejar q te quedes con el collar jajajajaja

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  6. Me ha gustado mucho lo de la "confusión", y que no fue creada por Confucio, como fue la respuesta de una candidata a Mis Universo, cuando le preguntaron quien era Confucio y contestó "el que creó la confusión", esta la hizo un pequeño niño.
    Te pregunto´, ¿en la caja solo estaba el collar?, o había alfajores?, jajaja, ¿devolviste el collar? o aún lo tienes.

    Yo también me irrito cada vez que leo que a los de política de izquierda les digan zurdos, soy zurda con ideología democrática, y como soy ambidiestra, ya que nací zurda y me enseñaron a usar la derecha, no se como me llamarían políticamente, jaajaja.
    Linda tu entrada, me alegró la mañana.
    Cariños,
    Maricarmen

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  7. Ha - eso es una gran historia, y que muchas coincidencias, todo en uno:)

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  8. Buena historia la del collar y los alfajores. Exija sus alfajores querida, que al devolver el collar has dejado la caja vacía y también la barriga...
    Un abrazo!

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  9. Saludosde USA.
    Muy gracioso!Muy gracioso!Me he divertido muchisimo Ay! Los ninos casi siempre hacen y dicen cosas que despues nos hacen reir muchisimo.
    En cuanto a los alfajores,pienso que vas a tener que esperarte hasta la proxima navidad y entonces exigir doble porcion; estoy segura de
    que es una buena explicacion. Eres zurda Gabrielita? Tio tambien lo era, Dino es ambidiestro. Patricia es zurda. Siempre he sabido que ser zurdo es sinonimo de inteligencia,
    de habilidad y etc..etc..etc..Eres priviligiada Gabrielita. Te quiero.
    Cotiti.

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  10. No sueltes el collar hasta que no te devuelvan tus alfajores.

    Me fascina ver escribir a los zurdos. ¿Que tal decir que sabes usar los dos hemisferios del cerebro?

    Un beso

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  11. Eso no lo sé, Cyrano, no me lo comí.
    :D

    De verdad estaba bonito, Lina, por eso fue fácil pensar que ese era el regalo.

    Tal vez no me hubiera quedado bien, AleMamá.

    Felizmente no reciclaste el regalo, Martín.

    Difícil Olenka, ya se lo mandé a su dueña.

    La caja solamente contenía un collar, Maricarmen. Ni medio alfajor.

    Todo en uno, Estrella, es verdad.

    Exacto Cheluca, me quedé sin soga y sin cabra.

    Totalmente zurda, Consuelo. ¿No sabías?

    Ya solté el collar, María Jesús. ¿Y si te dijera que puedo leer y escribir como espejo? ¿Y de cabeza?

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  12. QUÉ DISFRUTE DE OCURRENCIA Y DE "MILAGROS" NAVIDEÑOS...VENIDOS DE LA MANO DE UN ANGEL...TE SUGIERO LO TOMES COMO UN PRESAGIO....NADIE SABE QUE ALGO ASÍ PUEDA TRAER CONSIGO MUCHAS SORPRESAS GRATAS,CON RESULTADOS HALAGADORES Y PORQUÉ NO...HASTA DE AMOR...ENTREGADO POR OTRO ANGEL QUE YA DEBE ESTAR POR LOS AÑOS DE LA JUVENTUD...SI ES QUE LA MEMORIA NO ME FALLA.

    BIENVENIDO SEA... QUE LA VENTURA Y GRACIA SEA SATISFACTORIA PARA TÍ MI QUERIDA GABY.

    AHORA YA PUEDO RETOMAR Y DISFRUTAR LA BUENA LECTURA Y EL GOZO DE SABER QUE A QUIENES ESTIMO LES LLEGA MOMENTOS DE SANOS, Y HERMOSOS RECUERDOS PARA EL FUTURO.

    BENDICIONES...SALUDOS POR CASA Y QUE ESTE AÑO LLENE TU COFRE DE AMOR Y PROSPERIDAD. ASÍ SEA.
    ANTONIO

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  13. ¡Super post! ¡Lo máximo!

    Ja ja ja mira pues con el regalo que no era regalo.

    ¡Saludos!

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  14. No se vale, Gaby, te deben una caja de alfajores o un collar.
    Me hiciste recordar que hace poco me compré un sacapuntas para zurdos y me encontré con la sorpresa de que NO LO SÉ USAR. Me acostumbré :(
    Qué vergüenza me da haberme "adiestrado" en ese sentido.

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  15. ¿Y si te hacías la loca con el collar? jajaja a mi me pasó algo simila a lo que cuenta otro comentarista con el dinero dentro de un libro, pero con mi propio dinero. Guardé un billete verde en un libro (nadie toca mis libros) y me olvidé del asunto, luego lo recordé, pero no estaba viviendo en Lima. Años después regresé y lo busqué sin resultado. Un día, en el que andaba escaso de fondos, de casualidad se me da por mirar uno de mis libros y zas... encuentro el billetín! me hizo la semana! :)

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  16. Recuerdas bien a mi querido ángel, Antonio. En poco más de un año estrenará DNI celeste con todas las de la ley.

    Así pasa cuando sucede, Renzo.

    Para que veas lo que es mi vida casi cada día, Marianne.

    Supongo que no te refieres al billete verde con la cara de José Abelardo Quiñones, Juan.

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  17. Una historia divertida, merecia que nos la contaras.

    Recibe un gran abrazo.

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  18. La vida nos regala historias simples que vale la pena compartir, Javier.

    Gracias a ti por leerme, Marta.

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