domingo, 25 de octubre de 2009
La bodega de doña Rosa
jueves, 15 de octubre de 2009
Semana de blogueo en contra de las encuestas
Muchos domingos al año nos despiertan con el titular: "Fulano acapara al electorado". Y si uno lee bien la ficha técnica, en el 99.99% de los casos, la encuesta se realizó en Lima y Callao con nombres que solamente suenan en Lima y Callao. Una que otra encuesta refleja lo que piensan los electores de las ciudades del interior del país. Rarísima vez incluye poblaciones rurales un tanto alejadas.
Por ahí argumentarán que es complicado hacer encuestas en núcleos no urbanos. Entonces no hagan parecer que las encuestas que publican se refieren al sentir de todo el país. Para empezar, a mí jamás me han preguntado por quién pienso votar si las elecciones fueran mañana. Pregunta que parte de una premisa falsa, porque las elecciones no son mañana. Ni pasado mañana.
Además, no todo queda ahí, porque en los dos o tres días subsiguientes, solamente se hablará de eso en los medios. Sesudos comentaristas desmenuzarán los resultados de la importantísima última encuesta, otros se plantearán infinitas dudas cuasi hamletianas de cómo sería el Perú a partir de unos resultados que no son reales porque mañana no hay elecciones. Los nombres que figuran en los primeros lugares se ufanan ante los resultados. Los demás dicen que una encuesta no representa nada, argumentos que serían completamente opuestos si ellos fueran los primeros de la última encuesta.
Por eso, porque creo que es un inútil desperdicio de tiempo, de esfuerzo y de recursos...
¡NO MÁS INÚTILES ENCUESTAS DE INTENCIÓN DE VOTO!
jueves, 8 de octubre de 2009
Parrillada nocturna
El motivo de la reunión era la breve visita de P a la patria, luego de cuatro años de haber partido a Australia. Además, C inauguraba departamento con pequeño patio de parrillas incluido, ideal para una parrillada nocturna de esas a las que el Grupete es tan aficionado.
jueves, 1 de octubre de 2009
Mensajeros
Le dije: ¿quiere cruzar? Pues vamos. Se aferró a mi brazo y empezamos caminar juntas con paso firme y decidido. Llegamos a la berma central que divide ambos sentidos de la Av. 28 de Julio. Ahí esperamos al nuevo cambio de luz, porque este semáforo tiene un sistema diferente para cada sentido del tránsito.
En ese medio minuto de espera, volteé hacia la señora, quien con una sonrisa me dijo que mi chompa le parecía linda. Se lo agradecí, mientras pensaba que no había sido mi primera elección del día, sino que me había visto obligada a cambiarme antes de salir de la casa porque el clima del día resultó no ser el que yo esperaba (lo que hace que no me gusten estos días de indefinición climática tan limeños).
Cruzamos la segunda mitad de la avenida, y le pregunté hasta dónde se iba con la idea de ir con ella hasta donde me indicara. Pero me contestó que no me preocupara, que había quedado en encontrarse con su hijo en la puerta de la empresa de celulares que queda en esa esquina. Y al soltar mi brazo me dijo: "Dios te bendiga, hijita. Nunca hubiera podido cruzar sola".
Caminé dos pasos, y decidí voltearme a verla. Estaba segura de que ya no la vería, como pasa con los ángeles en las películas. Tenía la esperanza de no verla donde la había dejado.
Pero mi ángel mensajero, el que me alegró él día con una simple frase oída tantas veces, seguía parada en donde la había dejado. Buscaba con la mirada al hijo que no supe si se demoró en llegar. No volví a voltear. Creo que me dio miedo comprobar que esta vez ya no estaría.
O tal vez seguiría ahí para despistarme, como si, a pesar de estar sin sus alas, no me hubiera dado yo cuenta de que era un ángel mensajero que me devolvió buena parte de la tranquilidad que me faltaba.