Después de relatos de peines y zapatos con voluntad aparentemente propia, vuelven las perlitas. Las de esta entrada tienen meses en calidad de borradores. No sé por qué se me pasó publicarlas. Más vale tarde que nunca, así que ahí van.
Pues si, más perlitas, fuente inagotable de asombro.
Ya se anunciaron los ganadores del Premio Nobel 2012. El día que alguien invente una licuadora que no haga ruido, deberían nominarlo para Premio Nobel de la Paz del año que fuera. Lo mismo para todo aquel que invente electrodomésticos que no hagan bulla. ¿Se imaginan una licuadora que funcione en silencio? ¿O una aspiradora? La paz total.
Pues si, más perlitas, fuente inagotable de asombro.
El tobillo estaba tan ensangrentado que tuvieron que duplicar la palabra para darnos una idea mejor de la situación del pobre Cristiano.
Mmmm... ¿no sería más fácil balancear la vida nomás? No se compliquen con palabras que no existen y consejos raros.
A ver, ¿quién de los lectores es el primero que nota dónde falta una S en este cartel? Es el cartel de una institución pública, que con todo y el error está a la vista de todo aquel que pase por la céntrica avenida donde está ubicado. Lo más gracioso es que un poco más allá hay otro cartel con la palabra correctamente escrita. Además, ¿creerán que si ponen solamente "niños" las niñas van a creer que a ellas no las incluyen? ¿Y qué van a decir las adolescentas (palabra que sé que no existe, por si acaso)? ¿Que una vez que dejan de lado la niñez no tienen policía especializada? Ese lenguaje al que llamo inclusivo, tan de moda en estos tiempos, llama mucho mi atención. Y no precisamente para bien.
Todo sería muy fácil si supiéramos qué es un docigo.
Será que la postura es ambigua nomás, sin diéresis.
--------------Mmmm... ¿no sería más fácil balancear la vida nomás? No se compliquen con palabras que no existen y consejos raros.
A ver, ¿quién de los lectores es el primero que nota dónde falta una S en este cartel? Es el cartel de una institución pública, que con todo y el error está a la vista de todo aquel que pase por la céntrica avenida donde está ubicado. Lo más gracioso es que un poco más allá hay otro cartel con la palabra correctamente escrita. Además, ¿creerán que si ponen solamente "niños" las niñas van a creer que a ellas no las incluyen? ¿Y qué van a decir las adolescentas (palabra que sé que no existe, por si acaso)? ¿Que una vez que dejan de lado la niñez no tienen policía especializada? Ese lenguaje al que llamo inclusivo, tan de moda en estos tiempos, llama mucho mi atención. Y no precisamente para bien.
Todo sería muy fácil si supiéramos qué es un docigo.
Será que la postura es ambigua nomás, sin diéresis.
Ya se anunciaron los ganadores del Premio Nobel 2012. El día que alguien invente una licuadora que no haga ruido, deberían nominarlo para Premio Nobel de la Paz del año que fuera. Lo mismo para todo aquel que invente electrodomésticos que no hagan bulla. ¿Se imaginan una licuadora que funcione en silencio? ¿O una aspiradora? La paz total.