Hay un lugar que vive desde siempre en mi mente dentro de recuerdos propios y ajenos: Yurimaguas.
Conocí Yurimaguas a los cuatro años, y fue ahí donde vi por primera vez y en vivo y en directo vacas y terneras. Le di leche en una tremenda mamadera a una que se llamaba Yuyu, que después supe que significa algo así como bebé.
La tierra tenía un olor que yo no había percibido antes y que no olvidaré jamás. La lluvia fue otra cosa nueva para mí, tan diferente de las garúas limeñas. La gente se saludaba por las calles, y no sé cómo, todos sabían que yo era la nieta de don Pedrito, que había llegado de visita desde Lima. Iba por esas calles de la mano con mi mamá, con un sol que deslumbraba los ojos.
Las mujeres llevaban canastas en la cabeza. No importaba cuánto se inclinaran por lo irregular del camino, la canasta seguía firme en su sitio, apuntalada por pañuelos enrollados, llenas de aguajes y quién sabe qué otros contenidos que estas loretanas erguiditas llevaban quién sabe a dónde.
Ahí conocí la Catedral de Yurimaguas, orgullosamente construida por mi bisabuelo don José Riera Torra, el catalán. Hay una placa que lo acredita como el constructor, y a pocas cuadras de ahí, una calle lleva su nombre.
La campana de la catedral marca las horas, las medias horas y los cuartos de hora con diferentes series de tañidos que se oyen por todos lados. Creo que no debe haber mayor sensación de estar en casa que escuchar esas campanadas. Yo que estaba de visita las sentía tan familiares, así que imagino lo que será para los que la escuchan después de años. De tiempo, como dicen allá.
Mi abuela, conocida universalmente como la señora Margarita, tenía un pequeño huerto dentro de su casa, con gallinas incluidas. Había que tener la puerta cerrada para evitar tener gallinas andando por toda la casa. Era la única puerta que se tenía cerrada, porque la de la calle permanecía abierta todo el día. Toda una curiosidad para una pequeña limeña como yo.
En la noche nos sentábamos en mecedoras en la vereda, y todos los transeúntes paraban un ratito a saludarnos.
Un día, de camino a la chacra La Esperanza, de propiedad del abuelo, me caí al piso de tierra cuando subíamos por un tronco tendido de manera diagonal, a manera de improvisado puente. Me hice una tremenda herida en la rodilla, que son gajes del oficio de tener cuatro años.
Recuerdo la delicia que era tumbarse en la hamaca de la chacra y ver todas las variedades de verde que el ojo y el cerebro pueden registrar, y un cielo azul con nubes tan blancas como el algodón. Vi y probé en vivo y en directo las frutas más raras del mundo, para mí, por supuesto, que solamente conocía las tradicionales que había en Lima.
A pesar de estar descubriendo todo ese mundo nuevo, un día lancé un reclamo: "extraño a mi familia", sin darme cuenta de que estaba con mi familia, en mi casa.
En Yurimaguas pelé tantos aguajes que hasta se me infectó una uña por no hacerlo bien, porque se me incrustó un trocito de cáscara. Durante días la infección fue cediendo, y a pesar de que era bastante fastidioso, nunca me acostumbré a pelar aguajes con cuchillo porque se pierde demasiada pulpa. Lo que no se perdió jamás fue mi gusto por el aguaje. Casi todas las frutas de la Selvas son ácidas, a excepción de la piña, la más dulce que he probado nunca.
El cine quedaba literalmente a la vuelta de la esquina. El local era propiedad de don Pedrito, lo que nos concedía ciertos privilegios. Ahí vi como cinco veces la misma película en un viaje posterior, al que fui con mis hermanos.
Entre los recuerdos ajenos están el carro de lujo, "Canción de cuna" con su único rollo, la casa Khan, el vapor Huallaga, el "cielo y la tierra, el cielo y la tierra", los amaneceres sobre el río, los hacendados que venían imponentes a caballo y acompañados de un séquito, del niño que aprendió a leer para portar los carteles del cine de su cuñado. Como no son recuerdos míos, se los dejo a sus poseedores. Que quienes se sientan transportados en el tiempo por mis palabras los disfruten.
Cuando leo sobre las correrías de los hermanos Finch en Maycomb, cuando veo a Totó recorriendo las calles de Giancaldo o a los Alcántara caminando por Sagrillas tengo esa rara sensación de haber visto y vivido personas y situaciones que nunca he visto y de las que solamente he escuchado hablar o de las que he leído... como me pasa con esos atesorados recuerdos ajenos.
Un lugar que vive en mi mente, en recuerdos propios y ajenos. Se llama Yurimaguas, la perla del Huallaga, capital de la provincia de Alto Amazonas.
Conocí Yurimaguas a los cuatro años, y fue ahí donde vi por primera vez y en vivo y en directo vacas y terneras. Le di leche en una tremenda mamadera a una que se llamaba Yuyu, que después supe que significa algo así como bebé.
La tierra tenía un olor que yo no había percibido antes y que no olvidaré jamás. La lluvia fue otra cosa nueva para mí, tan diferente de las garúas limeñas. La gente se saludaba por las calles, y no sé cómo, todos sabían que yo era la nieta de don Pedrito, que había llegado de visita desde Lima. Iba por esas calles de la mano con mi mamá, con un sol que deslumbraba los ojos.
Las mujeres llevaban canastas en la cabeza. No importaba cuánto se inclinaran por lo irregular del camino, la canasta seguía firme en su sitio, apuntalada por pañuelos enrollados, llenas de aguajes y quién sabe qué otros contenidos que estas loretanas erguiditas llevaban quién sabe a dónde.
Ahí conocí la Catedral de Yurimaguas, orgullosamente construida por mi bisabuelo don José Riera Torra, el catalán. Hay una placa que lo acredita como el constructor, y a pocas cuadras de ahí, una calle lleva su nombre.
La campana de la catedral marca las horas, las medias horas y los cuartos de hora con diferentes series de tañidos que se oyen por todos lados. Creo que no debe haber mayor sensación de estar en casa que escuchar esas campanadas. Yo que estaba de visita las sentía tan familiares, así que imagino lo que será para los que la escuchan después de años. De tiempo, como dicen allá.
Mi abuela, conocida universalmente como la señora Margarita, tenía un pequeño huerto dentro de su casa, con gallinas incluidas. Había que tener la puerta cerrada para evitar tener gallinas andando por toda la casa. Era la única puerta que se tenía cerrada, porque la de la calle permanecía abierta todo el día. Toda una curiosidad para una pequeña limeña como yo.
En la noche nos sentábamos en mecedoras en la vereda, y todos los transeúntes paraban un ratito a saludarnos.
Un día, de camino a la chacra La Esperanza, de propiedad del abuelo, me caí al piso de tierra cuando subíamos por un tronco tendido de manera diagonal, a manera de improvisado puente. Me hice una tremenda herida en la rodilla, que son gajes del oficio de tener cuatro años.
Recuerdo la delicia que era tumbarse en la hamaca de la chacra y ver todas las variedades de verde que el ojo y el cerebro pueden registrar, y un cielo azul con nubes tan blancas como el algodón. Vi y probé en vivo y en directo las frutas más raras del mundo, para mí, por supuesto, que solamente conocía las tradicionales que había en Lima.
A pesar de estar descubriendo todo ese mundo nuevo, un día lancé un reclamo: "extraño a mi familia", sin darme cuenta de que estaba con mi familia, en mi casa.
En Yurimaguas pelé tantos aguajes que hasta se me infectó una uña por no hacerlo bien, porque se me incrustó un trocito de cáscara. Durante días la infección fue cediendo, y a pesar de que era bastante fastidioso, nunca me acostumbré a pelar aguajes con cuchillo porque se pierde demasiada pulpa. Lo que no se perdió jamás fue mi gusto por el aguaje. Casi todas las frutas de la Selvas son ácidas, a excepción de la piña, la más dulce que he probado nunca.
El cine quedaba literalmente a la vuelta de la esquina. El local era propiedad de don Pedrito, lo que nos concedía ciertos privilegios. Ahí vi como cinco veces la misma película en un viaje posterior, al que fui con mis hermanos.
Entre los recuerdos ajenos están el carro de lujo, "Canción de cuna" con su único rollo, la casa Khan, el vapor Huallaga, el "cielo y la tierra, el cielo y la tierra", los amaneceres sobre el río, los hacendados que venían imponentes a caballo y acompañados de un séquito, del niño que aprendió a leer para portar los carteles del cine de su cuñado. Como no son recuerdos míos, se los dejo a sus poseedores. Que quienes se sientan transportados en el tiempo por mis palabras los disfruten.
Cuando leo sobre las correrías de los hermanos Finch en Maycomb, cuando veo a Totó recorriendo las calles de Giancaldo o a los Alcántara caminando por Sagrillas tengo esa rara sensación de haber visto y vivido personas y situaciones que nunca he visto y de las que solamente he escuchado hablar o de las que he leído... como me pasa con esos atesorados recuerdos ajenos.
Un lugar que vive en mi mente, en recuerdos propios y ajenos. Se llama Yurimaguas, la perla del Huallaga, capital de la provincia de Alto Amazonas.
PD: si tienes algún recuerdo de Yurimaguas, o si tienes tu propio "Yurimaguas", deja tu comentario al final de este post.
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Crédito de las imágenes de Google Images.
P.D.: agradezco a Eduardo Ávila por la mención a este post en Global Voices Online.
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Crédito de las imágenes de Google Images.
P.D.: agradezco a Eduardo Ávila por la mención a este post en Global Voices Online.
Lindo tu articulo, de verdad, te toca otros recuerdos, me hiciste pensar en la hacienda de la familia en Ancash... los indios la llaman Chiguain (casa del cuervo), los "blancos" lo llamaban San Luis... Mira donde me ha mandado tu articulo... y sigue...
ResponderEliminarQue hermoso articulo, y cuantos recuerdos. Me has hecho retroceder el tiempo y volver a esos lugares y a esas epocas que forman parte de mi vida y de mi ser. Es como ver una pelicula o leer un libro de esos que quedan impresos en tu memoria.
ResponderEliminarLindísimo, provoca tomar un avión e ir hasta allá. Hablas con tanta ternura que hasta se me han aguado los ojos, y eso que yo no comparto ninguno de esos recuerdos. Pero, al igual que a Carmen, me ha transportado en el tiempo hacia otros lugares donde sí he dejado un poco de mi corazón (Huachipa, por ejemplo).
ResponderEliminarTranquila y calurosa ciudad. Estuve el 2006 por ahí (la última vez). Te dejo unas fotos de esa ocasión, q lamentablemente no están enfocadas en la ciudad propiamente dicha, pero algo se ve.
ResponderEliminarhttp://es.zooomr.com/search/photos/?s=awe&w=11629@Z01&q=yurimaguas
Estaba dejando mi comentario y hubo una baja de luz que me apagó la compu..y como no sé si salió o te vuelvo a decir que tu relato me pareció hermoso y lleno de tanto cariño. Aunque no conozco Yurimaguas lograste transportarme con cada frase.
ResponderEliminarBesos
Tengo que hacer una pequeña corrección, me cuenta mi mamá que en realidad cumplí 1 año en Yurimaguas y además que a los 5 hermanos nos dió tos convulsiva pero por suerte leve gracias a la vacuna...igual imagino lo mal que la pasaron en las noches con los 5 ahogándonos y con tos...
ResponderEliminarCarmen, Ana Cé: me alegro de haberles hecho recordar buenos tiempos.
ResponderEliminarLina: suponía que algo así ibas a decir. :D
Juan: gracias por el link. Revisaré las fotos que tiene.
Katy: cinco niños enfermos... debe ser complicado. Supongo que a tu tía Julita le gustaría leer este post.
HE SENTIDO EN CARNE PROPIA LA EMOCIÓN... REMONTARSE A UNA INFANCIA FELIZ NO HACE OTRA COSA QUE DESPERTAR EMOCIÓN
ResponderEliminarDISFRUTÉ MUCHO LEER ESTAS LÍNEAS QUE LLEVAN CONSIGO NOSTALGIA Y MUCHO AMOR POR LAS RAÍCES FAMILIARES E IGUAL HIZO TRANSPORTARME A AQUEL YURIMAGUAS QUE POR LO VISTO ES UNA DE LAS PARTES DE NUESTRO PERÚ QUERIDO MÁS BELLAS...
DON PEDRITO Y DOÑA MARGARITA...TU ABUELA SE LLAMA IGUAL QUE MI MAMA...
Si, seguro que si, le voy a decir a mi mami que se lo lea porque ya está muy viejita la pobre.
ResponderEliminarJuan: estuve viendo las fotos de tu link. Qué bello arcoiris... y veo esas casitas tan típicas e inmediatamente vuelvo a sentir ese olor inolvidable.
ResponderEliminar¡Gracias!
Nunca he estado en Yurimaguas, pero conozco ese lugar donde todos se saludan, donde las horas de la siesta son largas y coloridas y una tía vieja te lleva a alimentar un burrito recién nacido. "Mi Yurimaguas" se llama distinto, pero allí están también mis abuelos, y un montón de historias y recuerdos que se han ido. Es un lugar al que ya no podemos volver y aunque lo digamos con nostalgia, así son las cosas. :) Y por otra parte, tu creas otro Yurimaguas para tus sobrinos...
ResponderEliminarUn beso,
Marcela
En Yurimaguas conocí a dos de las hermanas de mi tía Angelita: mi bisabuela Virginia y mi tía Magdalena. Pero creo, Marcela, que estos recuerdos no se han ido. Están en nosotros, son parte nuestra... felizmente.
ResponderEliminarPor cierto, ¿cómo se llama "tu" Yurimaguas?
Los recuerdos que se han ido son los de las personas que quedan en nuestros recuerdos... no sé si me explico. :)
ResponderEliminarMi Yurimaguas se llama Colonia Segovia, y está cerca de Mendoza.
Un beso,
Marcela
Recuerdos de nuestros recuerdos que se han ido para siempre. Es demasiado definitivo, y duele solamente pensarlo. Cuando más siento la falta de los que quiero pero ya no están es cuando quiero recurrir a sus recuerdos para construir los míos.
ResponderEliminarGracias Marcela por decirme que construyo un Yurimaguas para mis sobrinos. Pocas cosas me harían más feliz que eso.
Muy buen articulo...me facina todo lo que hablan de mi ciudad, estoy proximo a llegar y sabes lo bueno que se pasa ahi.. es como estar en el paraiso, es un alivio despues de estar en la lima tan agoviante...
ResponderEliminarMe alegro Jerome de que te haya gustado. No voy a Yurimaguas desde 1993, tal vez le encuentre muy cambiada... pero en mis recuerdos tendrá por siempre ese olor inolvidable de tierra mojada por la lluvia.
ResponderEliminarQue relato tan bueno.
ResponderEliminarYo tengo muchos recuerdos muy buenos de Yurimaguas. Además los puedo separar en dos épocas de mi vida. Uno de los recuerdos, de niño, es la imagen de mi madre y mi hermano y yo sentados en la escalera de la casa que da a la calle revisándonos la cabeza en busca de esos animalitos.
El otro, ya de grande, el quedarnos sin luz por las calles en el pueblo con el abuelo de guia, claro, con un ojo a medias y el montón de cerveza que ya llevabamos a esa hora.jejeje.
Un abrazo.
Juan.
Hola primo:
ResponderEliminarMe alegro mucho que te haya gustado y que te haya traido recuerdos de esos que a uno lo hacen sonreir con toneladas de nostalgia.
Que lindo artículo y como es cuando uno abre su corazón al planeta con su verdor, sus gentes, animales y bellezas. Al llerte quiero caminar por esa catedral, conocer Yurimaguas y sus gentes hermosas.
ResponderEliminar¿Se acuerdan del barrio José Olaya? Cuando era pequeña (o no tan pequeña) me gustaba ir a bañarme cuando crecia el rio con otras amigas pero como no sabía nadar flotaba en un trozo de "topa". Claro, ahi no solo flotaba yo, se encontraba flotando de todo jejeje.
ResponderEliminarMe gustó mucho lo que recuerdas de Yurimaguas son los recuerdos de todos los que conocimos Yurimaguas en esas épocas añoramos, aunque yo no conocí ese cine yo conocí el cine rex a lado de radio oriente en la calle progreso... que liiindo...
ResponderEliminarHOLA AMIGOAS, SOY DE YURIMAGUAS MI LINDA CIUDAD ME EMOCIONO CUANDO LEO9 SOBRE MI TIERRA, HACE 30 AÑOS NO VIVO AHI PERO SIEMPRE VIAJO A VER A MI FAMILIA SOY DE LA FAMILA NAVARRO BARDALEZ, VIVEN EN TNTE CESAR LOPEZ 410-412 TRISTEMENTE VIAJE EN SETIEMBRE CUANDO FALLECIO MI PADRE WIDSON NAVARRO, HASTA AHORA NO PUEDO MITIGAR ESA TRISTEZA QUE LO LLEVO POR DENTRO, ES HORRIBLE TENER QUE VER A TU PADRE VER QUE LO ENTIERREN Y VERLA DESAPARECER ES MUY TRISTE.NO QUISIERA QUE A NADEI LE PASE ESTO, ESEPRO QUE HAYAN PASADO UNA FELIZ NAVIDAD Y QUE EL AÑO NUEVO SE A DE PROSPERIDAD Y ESPERANZA CUIDENSE MUCHO Y BESOS A TODOS MIS PAISANOS.
ResponderEliminarQUE VIVA YURIMAGUAS AHORA ESTA MAS BONITA ME GUSTA QUE LAS CALLES TODAS ESTAN PAVIMENTADAS YA NO HAY BARRO CUANDO SE MANEJAB MOTO NO SE PODIA NI MANEJAR BIEN, PORQUE EL BARRO ATOCLLABA A LA MOTO JAJA, GRCIAS A LAS AUTORIDADES. AHHHH LO UNICO QUE LES PEDIO POR FAVOR NO LE PIERDAN A LA IGLESIA MATRIZ, HAY QUE CONSERVAR EL PATRIMONIO HISTORICO POR FAVOR AUOTRIDADES CONSERVALO SIEMPRE OJALOA VIAJE PARA EL AÑO Y QUIERO VERLA ARREGLADA, ESA IGLESIA CONOCI DESQE QUE TUV E USO DE RAZON DE AHI TIRABAN LOS CAPILLOS EN AGOSTO Y CORRIA EN SU TRAS DE LA VACA LOCA JAJAJAJA,. TE QUIERO YURIMAGUAS LINDA<.
ResponderEliminarQUIERO QUE LO CUIDEN A LA IGELSIA MATRIZ DE YURIMAGUAS PPOR FAVOR LAS AUTORIDADES CREO QUE NADA LES INTERESA, LOS PAISANOS NO DEBEMOS PERMITIR QUE SE PIERDA ESA HERMOSA IGLESIA, RECUERDO QUE CUANDO NACI YA ESTABA ESA IGLESIA ME GUSTABA MUCHO. NO SE A DONDE HACER LLEGAR MI DONACION PARA LA REOCNSTRCCUóN , EN SETIEMBRE ESTARE POR AHI OJALA YA LE ENCFUENTRE REMODELADA, PORQUE CUANDO VIAJE ESTE AÑO LE VI CERCADO DE SOGAS, Y LAS MISAS SE CELEBRAN AL COSTADO EN LA VCAPILLA, DONDE ESTAN LOS SACERDOTES Y LAS MONJAS QUE COMABOREN TAMBIEN PUES----AUTORIDADES HAGAN ALGO POR LA IGLESIA NO SEAN TACAÑOS. GRACIASS
ResponderEliminarTURISTAS DE TODO EL MUNDO VISITEN A MI TIERRA NATAL QUE ES YURINAGUAS LA PERLA DEL HUALLAGA NO TE DECEPCIONARAN CUANDO VEAN LOS HERMOSOS RIOS Y SU NATURALEZA----CUANDO VIAJES EN PEQUE PEQUE QUEDARAS DESLUMBRADO, AUQNUE TE PIQUEN LOS ZANCUDOS NO TE MATARAN JAJAJA, VISITA LORETO LA CUDAD DE LAS BERLLAS Y HERMOSSOAS SIERENAS Y SIRENOS JAJAJAJAJ. CUIDENSE Y UN BESO
ResponderEliminarGRACIAS YURIMAGUAS ,CUANDO REGRESO A MI TIERRA VULEVO A SER UNA NIÑA SALI DE AHI A LOS 15 AÑOS, LE EXTRAÑE MUCHO PORQUE ME FUI A VIVIR EN UN LUGAR FRIO, TENIA Q VIVIER ABRIGADA, NO COMO EN MI TIERRA CON MI SHORT Y MIS SANDALIAS Y CAMINABA EN LA ARENA,LUEGO ME PASEABA EN BICICLETA CON MIS AMIGAS, FUE MUY LINDO, AHORA VIVO EN CHACHAPOYAS TENGO DOS LINDAS HIJAS, ME LLAMOP MARISA NAVARRO BARDALEZ, LLAMEN AL 041-477090-DIRECCION REFGIONAL DE TRABAJO-AMAZONAS
ResponderEliminarAMIGAS DE LOS AÑOS 1978-1979- SOY MARISA NAVARRO BARDALEZ, ESTUDIE EN EL COLEGIO VIRGEN DE LOS DOLRES DE YURIMAGUAS, CLARO QUE ME RECUERDAN LES DESO UNA FELIZ NAVIDA Y UN PROSPEROP AÑO NUEVO Y QUE TODOS TUS ANHELOS SE CUMPLAN
ResponderEliminarSON LOS DESEOS DE TU AMGIA Y PAISANA MARISA GISELA NAVARRO BARDALEZ, CALLE TENIETE CESAR LOPEZ 410-412-YURIMAGUAS-LORETO PERU
CUIDEN A TIERRA NATAL YURIMAGUAS MIS HERMANAS VIVEN POR AHI CUIDENSE Y HASTA LA PROXIMA
ResponderEliminarNO SE OLVIDEN DE RECONSTRUIR NUESTRAS IGLESIA QUE ESTA UBICADA EN LA PLAZA DE ARMAS ES MUY BONITA YURIMAGUAS AHI SE COME RICO HAY VARIEDADES DE FRUTAS QUE ESOTY SEGURA QUE TE ENCANTARA. FELICES FIESTAS..........Y VISITEN A MI TIERRA LA PERLA DEL HUALLAGA
ResponderEliminarQUE LINDO ES YURIMAGUAS EXTRAÑO LAS CECINAS-CHORIZOS EL INCHICAPI Y LAS FRUTAS QUE SON MUY RICAS- CUIDEN A LA IGLESIA NO DEJEN QUE SE DERRUMBE, ES PATRIMONIO HISTORICO DE YURIMAGUAS-ES UNA BELLA CIUDAD
ResponderEliminarGracias por el entusiasmo en comentar.
ResponderEliminarQUE LINDA CIUDAD DE YURIMAGUAS CUIDENLA MUCHO POR FAVOR ES PRECIOSA ESA CIUDAD
ResponderEliminarLA CIUDAD DE YURIMAGUAS LA PERLA DEL HUALLAGA TODOS LOS QUE VISITAN LA CIUDAD Y SUS PAISAJES MARAVILLOSOS QUEDAN DESLUMBRADOS ......
ResponderEliminarojala las fiestas patronales en agosto salgan bonita. que viva la virgen de las nieves patrona de yurimaguas
ResponderEliminarQUE BUENO , CONOCZCO YURIMAGUAS -LORETO, ES UNA CIUDAD MUY TRANQUILA DE DIA Y DIABLITO EN LA EN LA NOCHE, SUS PAISAJES HERMOSAS Y SUS VARIEDADES DE COMIDA TAMBIEN.QUE RICO ES ESA CIUDAD. ME GUSTARIA VOLVER A VISITAR OJALA PUEDA IRME EN AGOSTO SU FIESTA PATRONAL.CUIDENSE Y QUIERA A SU TIERRA
ResponderEliminarya de grande, el quedarnos sin luz por las calles en el pueblo con el abuelo de guia, claro, con un ojo a medias y el montón de cerveza que ya llevabamos a esa hora.
ResponderEliminarHola yo tambien vivi en yuimaguas al leer tu historia me hizo recordar muchas cosas ,la pase super lindo ,pasear por las noches en bicicleta por el parque moralillos ,ir correr al aeropuerto y bañarnos en el rio huallaga ahhh y como olvidarme de los ricos juanes del sr.juanito el puerto la boca y de sus hijas q fueron muy amigas mias ....extraño yurimaguas y harto besitosss
EliminarQUE BONITO LEER SOBRE MI YURIMAGUAS RECUERDO QUE ME SENTABA SOBRE UN CARTON Y HACIA DE TOBOGAN A LA CUNETA DE LA ESCALINATA DONDE HOY COLINDA CON EL HOTEL RIO HUALLAGA DE TANTO RESBALARME SE ROMPIA EL CARTON Y YA SE IMAGINAN QUE MAS.......EL MANGO VERDE CON SAL QUE CONSEGUIAMOS DE LOS ARBOLES DE MANGO QUE HABIA EN LA PLAZA DE ARMAS......LOS PASEOS EN CANOA A ESCONDIDAS DE NUESTROS PADRES CON EL CORAZON LATIENDO FUERTE DE LA EMOCION.......EN FIN INNUMERABLES RECUERDOS QUE ME LLENAN DE NOSTALGIA......VISITA YURIMAGUAS TIERRA DE ENSUEÑO
ResponderEliminarla PERLA DEL HUALLAGA, CIUDAD UBICADA ESTRATEGICAMENTE EN EL MUNDO GLOBAL. ESTA EN PROCESO DE DESPEGUE ECONOMICO Y SOCIAL.
ResponderEliminarGracias Graciela, por esas semblanzas de Yurimaguas, me emocionó tanto, soy yurimagüino,estoy varado en Lima por el coronavirus, leer tu post me ha puesto nostálgico, te felicito por compartir tus recuerdos. Atte, Julio César Linares Nava.
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