miércoles, 28 de mayo de 2014

La tarjeta

Esta simple historia simple no es mía, me la mandó alguien que lee este blog con el debido permiso para publicarla.
------------------------------------

Como parte de mi trabajo, yo debía viajar a una ciudad del interior del país para organizar una actividad que iba a realizar la Gerencia General. Yo le había comentado esto a mi mamá, y precisamente en esos días ella conoció en una reunión a una señora que vivía en esa ciudad.

Mi mamá no perdió tiempo y le contó que yo, su hija, iba a viajar a ese lugar. La señora gentilmente le dio su tarjeta y le dijo que yo la buscara al llegar, porque ella también viajaría al día siguiente. Me lo contó, y yo no le hice el menor caso, al contrario, me fastidió que estuviera contando lo que yo iba a hacer, y así se lo dije.

Llegó el día de mi viaje y todo se complicó. Las dos personas que iban a ir conmigo tuvieron inconvenientes así que tuve que partir sola. El vuelo se retrasó, y llegué a la ciudad entrada la tarde. Un día perdido. No me quedó más que ir al hotel y esperar al día siguiente para contactar con el jefe de la sucursal de la empresa y empezar a trabajar. Me di cuenta de que estaba completamente sola, en una ciudad que no conocía y no sabía qué hacer. Me pesó no haberle hecho caso a mi mamá porque ni me acordaba el nombre de la señora que se ofreció para ayudarme.

En eso, en el fondo de mi cartera encontré ahí, escondidita, la tarjeta que mi mamá, madre al fin, había colocado sin hacer caso de mi pataleta. De inmediato llamé a la señora, que resultó ser una persona muy correcta y amable. Vino con su esposo a buscarme al hotel, me llevaron a conocer la ciudad, me invitaron a comer en un lugar muy bonito, y ya tarde me regresaron al hotel, en donde descansé para enfrentar la jornada siguiente con buen ánimo y corazón contento.

Mi mamá me recibió al regreso con esa sonrisa que tienen las madres cuando saben que han hecho felices a sus hijos, a pesar de sus protestas.

32 comentarios:

  1. Asi es! Mamá siempre tiene la razón y como dice el dicho Madre solo hay una!!!

    ResponderEliminar
  2. Bonita historia. Y es verdad, mamá no se equivoca cuando se trata del bien de sus hijos.

    ResponderEliminar
  3. Otra gran sonrisa -cómplice y contagiada- se me dibujó también a mí Gabriela...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tal vez recordando algún episodio vivido en primera persona, Milena.

      Eliminar
  4. Tem coisas que acontecem que as vezes nos surpreendemos. A mãe pressentiu a necessidade de alguém que protegesse sua filha. Um belo instinto materno.
    Bjos tenha um ótimo dia.
    Anajá

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Felizmente para la hija, la mamá no se dio por vencida, Anajá.

      Eliminar
  5. La intuiciòn de la madre sabìa que esa tarjeta podrìa servirle como asì fue. Por suerte ignorò la pataleta .
    Bonita historia y muy real.
    Felices dìas Gabri, mayo termina...se acercan las vacas...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pataleta es la palabra exacta, Chusa. Imagino que ya están descontando los días que faltan para descansar por allá.

      Eliminar
  6. Bonita historia, siempre las madres a la larga o a la corta terminan por tener un punto de vista favorable

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y a los hijos solamente les queda quedarse callados, Cheluca.

      Eliminar
  7. Me alegro que al final la historia saliera bien...Las madres siempre tienen razón:)))
    Buena semana.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Es una anécdota universal y cíclica... la hemos vivido siendo hijas y la viviremos siendo madres.
    Hermosa, gracias Gabri.

    Laly

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y sin ese "te lo dije" que a veces puede caer tan pesado, ¿no, Laly?

      Eliminar
  9. Es una percepción inteligente en general de las mujeres, Gabriela, no solo en su calidad de madres.
    En muchas ocasiones mi esposa ha tenido razón, pese a que en su momento yo minimizaba o descartaba su consejo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puede ser, Esteban, o quizá sea la parte de madre que hay en ella.

      Eliminar
  10. Dicen que no hay mal que por bien no venga. Así has disfrutado de un día que paresía muy aburrido gracias a tú mamá
    Besoss.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El relato no es mío, Norma, pero sí, esta persona lo pasó muy bien gracias a la terquedad de su mamá.

      Eliminar
  11. Suerte también que encontró la tarjeta justo a tiempo ;)
    ¡Besitos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí pues, imagínate que la hubiera encontrado al desempacar ya de vuelta en casa. ¡Qué chasco!

      Eliminar
  12. Jajajaa pues el " te lo dije " lo he soltado mas de una vez... jijii , tiene mucha razon mi querida Laly, cuando sé és madre, comprendes mucho mejor a la tuya... y piensas que cuanta razón tenia en ésto ó aquello...
    GRACIAS por tu amable coment. y encantada yo tambien de que te gusten mis entradas!

    Besitosss GUAPETONA.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Conociendo como conocí a esa mamá, lo más seguro es que no haya necesitado decir "te lo dije" para decirlo.

      Eliminar
  13. ¡Si es que Mamá siempre tiene razón y cuando no la tiene también! :P
    Besazo

    ResponderEliminar
  14. ¿Instinto maternal será? Los hijos tardamos demasiado en darnos cuenta de cuánto vale ese cuidado inigualable, infinitamente puro y desinteresado. Abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. También pudo ser la experiencia del que sabe más por ser más viejo, Martín. La cosa es que la hija se tuvo que tragar sus palabras.

      Eliminar

Por el cumplimiento del Reglamento de Protección de Datos de la UE (RGPD) 2016/679, al suscribirte a Seis de enero aceptas que se usen tus datos conforme a lo establecido en la política de privacidad. Esta establece los términos en que el blog usa y protege la información que brindan los suscriptores al usar el blog.