Un día, el protagonista descubre que la quiere. Corre a la casa de ella a decírselo. Son las 4 de la mañana. Toca el timbre. Se queda de piedra cuando es el antagonista quien abre la puerta. Es una competencia desigual. Una batalla perdida para el protagonista: un tipo común y corriente, que vive en una casa sin muebles y tiene un trabajo bastante común y corriente. Con el protagonista, la procesión SIEMPRE va por dentro. En cambio, el antagonista maneja un Mustang, bien podría ser confundido con el hombre más sexy del mundo, y es astronauta para más inri.
A pesar de ser una competencia desigual, gana el protagonista. Nunca se entendió, y hasta ahora, no se entiende, por qué ella lo trataba siempre tan mal, como si fuera una nueva versión de la canción "Mil horas". Por eso mismo, nunca se entendió, y hasta ahora, no se entiende por qué él la quería tanto.
Lamentablemente, y a pesar de ellos mismos, en esta historia no terminaron felices comiendo perdices.
--------------------------------
Europa está empezando a ponerse de cabeza. La protagonista es novicia, y le han encomendado ser la institutriz de los siete hijos de él. Siete hijos que, a pesar de la férrea disciplina militar que él les ha impuesto, se las arreglan para no aburrirse. Él está a punto de casarse con una baronesa, muy fina, muy refinada. Muy adecuada. Es una competencia muy desigual.
A pesar de ser una competencia muy desigual, después de unas cuantas canciones y un baile, gana la protagonista. La antagonista se va. La protagonista y él comen perdices, antes de ver desmoronarse su mundo.
Pero, juzgando por la parte que nos cuentan, encuentran su sueño. Y comen perdices, al menos en un sentido figurado.
--------------------------------
El protagonista. Ella. El antagonista.
--------------------------------
El protagonista. Ella. El antagonista.
El protagonista decide por los tres. Ella debe partir con el antagonista, porque si no lo hace se arrepentirá. Tal vez no ese día ni el siguiente, pero en algún momento y por el resto de su vida. Finalmente, ella debe recordar que siempre tendrán París.
Querida Gaby, me has dejado "con la miel en los labio". ¿ Es una serie de TV?, ¿Es una novela o son hechos de la vida real?. Me gustaría leerla o verla según sea el caso. Yo pienso que cuando hay "Triángulos amorosos", !Núnca terminan felices comiendo perdices!. Me gustó la intriga.
ResponderEliminarCariños,
María del Carmen
Muy lindas las 3 historias y muy diferentes los finales !!
ResponderEliminarDeseo que hayas empezado un feliz 2010 , y que cada día sea mejor !!!
Un beso , cuidate .
Nancy
En todo caso, Gabriela, te deseo con protagonistas y antagonistas incluidos, un mundo de felicidad en 2010.
ResponderEliminarCon cariño.
Nice story Gabriella
ResponderEliminarHay algunos triángulos que terminan bien.
ResponderEliminarUno nunca sabe con quién podría toparse o si se está con el que finalmente será el protagonista o el antagonista...
Entrañables la serie y las películas clásicas que resumes. Uno se pregunta, por ejemplo, ¿qué hubiera pasado si el alocado protagonista de la serie encontraba el camino libre? ¿o si el avión hubiera partido, no con el héroe, sino con el que decidió por los tres? ¿o si a los miembros de la familia Trapp los hubieran detenido cuando escapaban por los Alpes? Las historias serían otras, pero no perdurarían, estoy segura.
ResponderEliminarSon famosos triángulos, Maricarmen, algunos más que otros. Estoy segura de que los has visto.
ResponderEliminarGracias Nancy, lo mejor en 2010 para ti y los que quieres también.
Qué bueno verte de vuelta, Esteban. Se te extrañaba en la blogósfera. Y gracias por los buenos deseos.
Thanks Amrita, and welcome here!
Así es Zocadiz, algunos terminan bien... al menos para el que gana.
Si el avion no partía con el héroe sino con el apátrida, pues creo que ella se hubiera arrepentido: no hoy, ni mañana... en algún momento y para siempre.
En cuanto al alocado protagonista de la serie, ella lo hubiera hecho muy infeliz.
Gabriela:
ResponderEliminarFuera de tema, con tu permiso.
Mi ausencia por algún tiempo de mi blog se debió a hechos programados, tales como operación de cataratas a ambos ojos, pero también a un viaje con mi señora con motivo de nuestros 40 años de casados. En el curso del mismo tuve la ocasión de estar de trasbordo en el aeropuerto de Lima, y sobre ello me permito comentarte. Primero, me sorprendió lo hermoso, cómodo y grato del mismo, enormemente mejorado con relación a las décadas en que yo viajaba a Perú para narrar fútbol. Además, pude comprobar in situ, una vez más, que la gastronomía peruana es la mejor del continente (con el perdón de los amigos de otras latitudes), ante el simple hecho de pedir un par de sandwiches en uno de los restaurantes del lugar. La presentación en el plato, y la calidad, cantidad y sabor de lo solicitado, pese a su aparente simpleza, me hicieron recordar que por algo en Chile si se trata de ir a la segura en la elección de un restaurant de gusto general, nadie se equivoca al decidirse por uno peruano.
Cariños.
Llegué por un comentario que dejaste en el blog de CatiRestrepo. Me gustaron estas historias y tu blog. Felicitaciones
ResponderEliminarGracias por esas palabras, Esteban. Cuando leo frases como las tuyas recuerdo cómo era todo por acá en los años ochenta. Tiempos y situaciones que ojalá no regresen nunca, ni acá ni en ningún otro lado.
ResponderEliminarUn honor, Álvaro, bienvenido.
Me identifico totalmente con el comentario de Lina. Que bella forma de hacernos recordar la serie y estas dos películas.
ResponderEliminarRecuerdo que yo me leí "Siempre nos quedará París" porque casi por coincidencia. Llegué al libro cuando organizaba un estante de libros en la biblioteca de mi Universidad.
Saludos,
Espero que este 2010 vaya muy bien,
Cati
No recordaba este post. Muy interesante la forma de plantearlo y platicarnos. Gracias.
ResponderEliminarLa primera no la conozco pero ya me hiciste favor de contar cual es.
La segunda la reconozco fácilmente, es La Novicia Rebelde (the sound of music)
La tercera también es fácil: Casablanca.
Muy buenas historias aunque mi favorita sin duda, La novicia rebelde, de hecho hace tiempo le hice post en mi blog. http://lacamaradelasmeditaciones.blogspot.com/2008/07/cuando-dios-cierra-una-puerta-siempre.html
Saludos afectuosos. Hilda
Saludos
Casablanca, mi triángulo favorito. Con 20 años no podía entender como Rick la dejaba marchar. Ahora con 40, veo que no podía ser de otro modo.
ResponderEliminarGracias por traerla (aunque 2 años antes)
Besos, Laly
Rick optó por la mejor decisión, Laly, aunque para él haya sido tan difícil.
EliminarGracias por leer (aunque dos años después).