Hace algunos meses publiqué algunas perlitas encontradas en diversos lugares de Lima. Acá van algunas otras, de diversa naturaleza.
Esto es algo muy común: confundir el pronombre personal tú con el artículo posesivo tu. Y no es algo que pasa solamente en el lenguaje escrito, también lo he notado en el lenguaje hablado, sobre todo publicitario. Como ese canal que dice que es tú mundo, así, con énfasis en la palabra tu. ¿Qué creerán? Yo mundo, tú mundo, él mundo, etc.
El oficio de lapicerólogo no lo conocía. Este señor atiende en una calle del centro de Lima, frente al Centro Cívico.
¿Qué pasa si hay 5,400 personas? ¿El sitio se hunde? Honestamente, espero que no.
Como siempre, las fotos fueron tomadas con mi celular. No es el mismo caprichoso de antes, lo cambié hace poco. Lo que sí se repite es la marca del teléfono, una que viene de un país muy frío, que está al norte de casi todo y que tiene en su territorio muchísimos lagos.
Muy bien Gabriela. Tu celular se ha convertido en importante elemento para el "control de calidad".
ResponderEliminarEn verdad, los casos expuestos son verdaderas "perlitas".
!!Que bueno Gaby,me gustó!!
ResponderEliminarTu celular es una maravilla, yo tengo que cambiar el mio, ya se pasó de viejo, y hoy hay en el mercado excentes, hasta te dicen por donde ir, especial para las desorientadas como yo,jaja.
De tus perlitas hay collares en toda la ciudad, hay que buscarlos.
Cariños,
María del Carmen
Hola Gabi! No dejan de sorprender estos carteles, yo nunca conocí a un lapicerólogo :)
ResponderEliminarMe estoy poniendo al día con los blogs..
Besos!
PD: tengo que firmar con otra cuenta de google porque hay problemas con wordpress.
Hola Gabriela:
ResponderEliminarLo del "lapicerólogo" si que tiene punta...
¿Que clase de lapiceros, tratará este señor?
Muy divertidas tus "perlitas"
Aquí a los celulares les llamamos normalmente "móviles"
¡Felicidades! por tu merecido premio.
Recibe un cordial saludo,
Luis
Pucha. Que triste.
ResponderEliminarSabes que hace un par de años trabajaba en una empresa donde las faltas de ortografía eran moneda corriente. Y no hablo de pares sino del nivel gerencial.
Imagínate.
Muy buenas... Genial el lapicerólogo :D :D Hay que preguntarle qué estudia exactamente la lapicerología.
ResponderEliminarMuchos saludos,
Marcela
Ahora, busca unas perlitas con esa enfermedad de la MAYUSCULITIS, que cada dos sustantivos ponen uno al menos con mayúsculas...
ResponderEliminarYo tengo faltas de ortografía, pero intento ir puliendo cad avez más y no conformarme. Gracias por los ejemplos
Que buenos fotos, es el primer vez que saber que hay differencia con tu y tu con accento :)
ResponderEliminarControl de calidad ni pedido ni autorizado, Esteban.
ResponderEliminarGracias por la visita.
Gracias Maricarmen, aunque es triste pensar que haya tatas perlitas por ahí.
Yo tampoco conocía a los lapicerólogos, Katia, ja, ja. Siempre se aprende algo nuevo.
Gracias por la felicitación, Luis.
No quiero ni preguntar a qué empresa te refieres, Renzo. Pero si, es triste.
Parece que el lapicerólogo es el que más ha llamado la atención, ¿no Marcela?
Gracias por darte el tiempo de visitarme.
La mayusculitis es un mal que afecta a demasiadas personas, AleMamá. Ese nombre me parece simplemente genial.
Si Tarek, hay una diferencia importante. Me alegra haberte dado a conocer algo nuevo.
jajajaja divertido...e instructivo.
ResponderEliminarSaludos Gabriela
cuando yo era chica, también quería ser lapiceróloga ;) en realidad, sigo siéndolo, amateur, claro :)
ResponderEliminarLa verdad que recoriendo las calles podemos ver faltas en muchos anuncios .
ResponderEliminarLo de la farmacia es muy cierto , pero tb, en las grandes superficie ( mercados ) tenes que cuidar lo que tikean .
Un beso , cuidate .
Nancy
Gracias JuanK.
ResponderEliminarQué bueno que no hayas dejado de lado tu vocación, Marta.
;)
Hay que tener los ojos bien abiertos siempre, Nancy.